Indefensión Aprendida

Indefensión Aprendida.

¿A qué nos referimos con indefensión aprendida?

¿Cómo detectarla?. ¿Qué hacer para superarla?

La indefensión aprendida es un estado psicológico que se produce cuando una persona siente la imposibilidad de cambiar ciertas situaciones, comportamientos y/o estados mediante su conducta. Tras varios intentos fallidos, comienza a asumir que no dispone de la capacidad o de las herramientas para conseguir ese cambio. Suele desembocar en una visión del entorno incontrolable para la persona, sintiendo que sus conductas y sus actos no influyen en el resultado obtenido.
Puede tener implicaciones muy negativas en la vida diaria de las personas y en su desarrollo. Por ello es importante entender qué es, cómo se produce, qué señales y síntomas tiene y cómo superarla.

¿Qué es la indefensión aprendida?

La indefensión aprendida fue formulada en un principio por el grupo de trabajo de Martin Seligman. Este grupo observó que una persona o animal se inhibe ante situaciones aversivas o dolorosas cuando no es posible la evitación o huida. Finalmente acaba desarrollando pasividadaprende a mantenerse indefenso antes estas situacionesaun cuando  que se puede llevar a cabo la huida o el afrontamientoSegún la teoría original, “Se dice que una consecuencia es incontrolable para un individuo cuando la ocurrencia de la consecuencia parece no estar relacionada con su respuesta”. Más concretamente, la persona siente que la probabilidad de que ocurra lo que desea o lo que necesita es independiente de como actúe ante esa situación. Por lo tanto, la consecuencia se entiende como incontrolable.

indefensión aprendida

QUE ES LA INDEFENSION APRENDIDA

El cuento de Jorge Bucay es un buen ejemplo para entender cómo se produce la indefensión aprendida. Un elefante nació en un circo encadenado, desde pequeño tiró y empujó para intentar soltarse, pero a pesar de sus esfuerzos, no consiguió escapar de las cadenas. Al crecer, el elefante grande y fuerte, no escapa porque cree que no puede. Tiene interiorizada la impotencia y el descontrol que sintió de pequeño al intentar soltarse y no ha vuelto a intentar cuestionarlo.

Se ha comprobado que personas que están expuestas a muchos estímulos negativos pueden adoptar comportamiento y pensamientos de indefensión, ya que pierden la capacidad de ver que tienen herramientas para afrontar la situación de forma útil y eficaz. Esto hace que se lleve a cabo un aprendizaje de respuestas de sumisión. Por ejemplo, una persona que tiene un trabajo que considera esencial para subsistir, ante situaciones de mobbing por parte de superiores, si siente miedo a perder el trabajo e impotencia, es posible que desarrolle indefensión aprendida.

Igual que el elefante del ejemplo anterior, las personas pueden interiorizar la percepción de descontrol e indefensión sobre los hechos que ocurren, llevándolos a interpretar como imposible de resolver, no solo lo adverso,sino los retos u objetivos que se le planteen. La indefensión aprendida genera pensamientos anticipatorios (expectativas) de inutilidad o incapacidad para resolver conflictos. Habitualmente las personas que sufren este estado sienten que las herramientas a su alcance no son válidas para las situaciones adversas que se encontrarán, presentan baja autoeficacia y autoestima.

Es importante hacer referencia a la influencia de la teoría de las atribuciones en este fenómeno. Se refiere a dónde la persona ubica la causa de lo que le está ocurriendo. El estilo atribucional interno es aquel en el que la persona atribuye a sí misma la causa, factores internos (eficacia, inteligencia, persistencia, etc.). En el estilo atribucional externo, la persona atribuye la causa de lo que le ocurre a factores externos (magia, suerte, otras personas, etc.).

Abramson, Seligman y Teasdale (1978) revisaron la teoría original e incluyeron el estilo atribucional como factor determinante en la aparición de la indefensión aprendida puesto que el sujeto elabora una atribución sobre la pérdida de control.

Encontraron tres factores que tienen efecto sobre la atribución en la indefensión aprendida:

  • Locus de control: la causa es interna o externa.
  • Estabilidad: la causa es continuada y mantenida en el tiempo o por el contrario es inestable, no siempre está presente.
  • Especificidad: si la causa afecta a una situación o afecta a muchas de las situaciones a las que nos enfrentamos.

Al combinar estos tres factores, se ha comprobado que las personas que interpretan los malos sucesos en función de causas internas, estables y generales serán más susceptibles a padecer indefensión aprendida. Específicamente, el locus de control interno predice baja autoestima y autoeficacia, síntomas base en las personas que sufren este estado. En conclusión, el estilo atribucional puede considerarse un factor de riesgo para la adquisición de la indefensión aprendida.

SEÑALES PARA DETECTAR LA INDEFENSION APRENDIDA

 Hay algunos déficits asociados al síndrome de la indefensión aprendida que nos pueden ayudar a detectar cuando se está padeciendo. Estos son:

  • Déficit motivacional: Inactividad o retraso en la aparición de nuevas respuestas, la persona no va a emitir una respuesta si no percibe que va a conseguir un resultado positivo. De esta forma la conducta se convierte en inútil “para qué voy a hacer esto, si no sirve de nada realizarlo”.

  • Déficit cognitivo: Retraso o interferencia en el aprendizaje de nuevas tareas de éxito. Es decir, aunque la nueva situación pueda ser afrontada, el individuo indefenso no es capaz de verlo y lo quepodría ser un aprendizaje de éxito se convierte en un fracaso.

  • Déficit emocional: estado de ansiedad, miedo y depresión. Puede presentar afecto deprimido, que suele estar determinado por las expectativas de que malas o desfavorables consecuencias ocurrirán.

¿Cuáles son los síntomas de la indefensión aprendida?

Hay gran variedad de síntomas que puede provocar la indefensión aprendida, dependerá de la persona, el tiempo que ha trascurrido y el entorno.
Los principales síntomas observados son:

  • Depresión
  • Inhibición conductual y pasividad
  • Falta de motivación y desistimiento
  • Expectativas negativas
  • Sistema atribucional negativo
  • Baja autoestima
  • Ansiedad
  • Aislamiento
  • Miedos recurrentes ante acontecimientos negativos incontrolables

Terapia psicológica para trabajar la indefensión

Son muchos los ejemplos en nuestra sociedad que evidencian la presencia y necesidad de intervención sobre este fenómeno como la violencia familiar, el bullying o el mobbing. La persona es incapaz de ver las soluciones, reafirmarse en sus capacidades (autoeficacia) y autoestima. La indefensión aprendida, se trata de un estado que no es innato, por lo tanto, podemos modificarlo o desaprenderlo.

Para lograr salir de la indefensión es fundamental el aprendizaje de comportamientos alternativos, reflejo de experiencias similares resueltas asociadas a expectativas y experiencias positivas. La persona que lo sufre debe entender que para superar las situaciones adversas el cambio debe proceder de sí misma. También es importante el aprendizaje por parte del paciente de su capacidad de control e influencia sobre diferentes situaciones del entorno

fobia-coronavirus

Psicólogos/as especializados/a pueden intervenir y acompañar en su proceso a personas con indefensión aprendida. Se puede tratar desde varias terapias, una de las más usadas para esta cuestión es la terapia cognitivo-conductual. El/la profesional ayudará al paciente a reestructurar sus pensamientos y emociones, además de las conductas aprendidas que impiden el desarrollo personal. 

Pedir ayuda es la mejor forma de prevención y autocuidado. Es el momento de hacerlo. ¡!!Llamamos!!!

TIENES A TU DISPOSICIÓN MAS DE 300 ARTÍCULOS EN NUESTRO BLOG, APRENDE DIDÁCTICAMENTE TEMAS DE PSICOLOGÍA QUE TE INTERESE, ENTRA EN NUESTRO BLOG  

SI TE HA GUSTADO ÉSTE ARTÍCULO, AYÚDANOS Y COMPÁRTELO EN TUS REDES SOCIALES

Autor: Rafael Beato Ortega
Compartidos
Compartir esto