Sufrir un dolor crónico la ayuda psicológica

Sufrir dolor crónico, como te puede ayudar el apoyo psicológico

“El dolor que no se desahoga con lágrimas puede hacer que sean otros órganos los que lloren”.
Francis J. Braceland

 
Qué es el dolor crónico

 

En España un 23,4% de la población sufre dolor crónico. La definición de dolor no solo se refiere a la experiencia fisiológica, sino que también se refiere a una dolencia psicológica. Es decir, el dolor se puede experimentar sin necesidad de una lesión. Hay personas que padecen dolor, aunque no se haya detectado una causa física.

Pero lo realmente importante no es la causa del dolor inicial sino la discapacidad provocada por este y los factores que favorecen que el dolor se cronifique.

El sufrimiento que produce el dolor se ve agravado con las emociones y sentimientos relacionados con el dolor, y lo que era una dolencia física termina por convertirse en una dolencia psicológica e incluso social, que afecta a todas las esferas de la vida: entorno familiar, amigos, vida sexual, sueño, etc. Además, de la repercusión económica que puede tener debido a: la incapacidad laboral, las visitas médicas, los medicamentos, etc.

Ante un dolor crónico el estado de animo de las personas empieza a decaer. Entre las emociones más usuales que padecen las personas con dolor crónico están la ansiedad y la depresión e incluso en algunos casos lleva al suicido.  No siempre las personas que sufren dolor crónico reaccionan de la misma forma. Hay algunas personas que adaptan su vida al dolor y su estado de ánimo se ve menos afectado.

A menudo, las personas con dolor crónico se sienten incomprendidas tanto por sus allegados como por el profesional médico que a veces no puede explicarles su patología o les recomiendan hablar con un psicólogo. Los pacientes a menudo viven esto con incomprensión y sienten que los médicos no les entienden o que los médicos piensan que se inventan el dolor, entonces se sienten como si se les culpabilizara por el dolor.

El dolor es algo que puede llegar a incapacitar no solo por la dolencia física sino por los pensamientos que se asocian, las emociones, el estrés, la depresión, la parte afectiva, etc., pero el dolor crónico y la discapacidad no tienen por qué estar unidos. A veces se puede tener dolor crónico y a pesar de ello se puede mejorar la calidad de vida. En algunos casos la causa orgánica puede generar discapacidad, pero no siempre es la única causa. A veces afecta el dolor crónico a los pensamientos, sentimientos y a las distintas áreas de la vida puede ser clave en que el dolor aumente o disminuya.

 
 

Si quieres saber sobre características y tratamiento del dolor crónico lee este artículo

 
Para tratar el dolor es importante evaluar cómo afectan las creencias del sujeto y que estrategias de afrontamiento está realizando. Cuanto menos efectivas sean estas estrategias de afrontamiento mayor estrés tendrá la persona y por lo tanto mayor dolor.
 
 
Hay muchos estudios que demuestran que el catastrofismo tiene efectos devastadores en los pacientes que sufren dolor, en este caso también hay que ayudar a disminuir este tipo de pensamientos y reducir así la discapacidad.
 
Otro factor importante para tener en cuenta es la capacidad que siente el paciente de manejar su dolor. Cuanto menor capacidad sienta el paciente mayor discapacidad, por lo que la autoeficacia será otra pieza clave a la hora de mejorar la calidad de vida. Las personas con mayor autoeficacia utilizarán más estrategias para formar el problema y podrán controlar cierta parte del dolor.

Qué se puede hacer si sufres dolor crónico

En Cepsim Madrid podemos ayudarte con algunas técnicas psicológicas a manejar tu calidad de vida. Los programas para el dolor cuentan con los siguientes pasos.
  • Explicación sobre cómo funciona el dolor, los factores psicológicos que influyen sobre el dolor.
  • Explicación de las distintas técnicas psicológicas a utilizar
  • Técnicas de relajación o hipnosis para poder rebajar el dolor.
  • Tomar conciencia y aceptación de nuestro dolor.
  • Modificación de pensamientos y creencias
  • Entrenamiento asertividad para poder expresar tus necesidades y que los demás puedan entender lo que pasa, así como evitar algunas conductas por miedo.
  • Aumento de actividades agradables.
  • Higiene del sueño en caso de que haya problemas para dormir.
  • Tratar la sexualidad en caso de que se vea afectada por el dolor.
  • Algunas otras estrategias de afrontamiento que pueden ayudar son la búsqueda de apoyo social, expresar las emociones, imaginarse que el dolor terminará pronto, tratamiento médico, etc.

Si quieres saber cómo puede ser el tratamiento para superar el dolor crónico y la fibromialgia lee este artículo

Queralto, J. (2005). Análisis de los factores psicológicos moduladores del dolor crónico benigno. Recuperado 26 abril, 2018, de https://www.redalyc.org/html/970/97017363002/

 
Autora: Rebeca Carrasco
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